Para muchas parejas, recibir un diagnóstico que afecta negativamente su fertilidad puede convertirse en un momento difícil al identificar que hay un factor que está obstaculizando el deseo de ser padres. Entender desde las emociones la situación puede convertirse en algo estresante, que, sumado a la explicación médica, se torna en un momento complejo donde surgen miles de inquietudes e interrogantes.
Pero el problema no termina ahí. Sus padres, hermanos, amigos y demás personas de su círculo social también quieren respuestas sobre cuándo llegará un hijo a su hogar. Es ahí donde la pareja debe tomar decisiones sobre cómo manejar el tema con sus seres queridos, para que esto no se convierta en otro dolor de cabeza para su estabilidad y su futuro como pareja.
La psicóloga del Grupo Inser, Susana Rodríguez, nos cuenta que, en ocasiones, este tema puede ser bastante álgido a la hora de tratarlo en familia. La especialista dice que, a pesar de que muchas personas prefieren callar su diagnóstico y dejarlo en la intimidad de la pareja “otras prefieren hablarlo directamente, ya que piensan que a partir de la honestidad, el entorno va a disminuir la presión o expectativas sobre el futuro hijo”.
Contar con una red de apoyo es fundamental para la pareja que busca tener un bebé por medio de la reproducción asistida. Esta se construye de acuerdo con los recursos y las relaciones que haya mantenido la pareja durante los años: “generalmente, la red de apoyo se vuelve confidente del proceso. Estos pueden ser familiares o amigos cercanos, que logren ser empáticos y abiertos al debatir temas relacionados con el diagnóstico o posibles tratamientos. También, resulta muy útil los grupos de apoyo de población infértil para hablar sobre los distintos momentos que se enfrentan en procesos de reproducción asistida. No siempre el que más te quiere es el que mejor sabe acompañar, a veces la cercanía genera sentimientos y expectativas comunes que resultan contraproducentes para la experiencia”.
Equilibrio, límites y honestidad, la base para la comunicación en familia
Se sabe que el equilibrio emocional es fundamental para que las parejas puedan tener un mayor éxito en su tratamiento de fertilidad. Es ahí donde la familia juega un papel muy importante para las parejas con infertilidad. “El sentirse querido, valorado y acompañado, refuerza la autoestima y la determinación, aspectos cruciales en la motivación y consecución de objetivos para la vida. En ocasiones, la familia puede representar una fuente de estrés, ya que de manera sutil o muy directa, aumentan la presión sobre el resultado”.
En el tema de la infertilidad, la familia y el entorno cercano pueden convertirse en los principales aliados a la hora de enfrentar este problema. Pero en ocasiones, estos también pueden obstaculizar el proceso emocional al que se atiene la pareja cuando tiene dificultades para lograr un embarazo. Entonces ¿cuál sería la solución? Los límites, desde el amor “que se traducen en anticipar a los seres queridos que solo la pareja hablará de su experiencia cuando lo crea necesario, ya que necesita estar tranquila y enfocada en la labor, pero que el amor, las oraciones y buenas energías siempre serán bien recibidas”.
La honestidad es también un gran aliado para poner límites al entorno social “En ocasiones, ayuda hablar con la verdad, ya que se genera un límite y respeto que invita a la prudencia. Además, que muestra que, efectivamente, no es un asunto de voluntad sino de una condición que no se puede controlar y ante lo cual se debe esperar y seguir la orientación médica. Es importante hablar con honestidad sobre lo que necesita la pareja durante el proceso y manejar límites claros y definir juntos si se necesita de algún apoyo financiero, logístico, entre otros”.
Por último, el acompañamiento emocional es fundamental para que las parejas aprendan a manejar este y otros temas relacionados con la fertilidad, pues permite generar el soporte emocional y los apoyos necesarios en cada momento (diagnóstico y tratamientos), resolver problemas y afrontar consecuencias de la infertilidad. También, ayudan a facilitar la comprensión de los procesos médicos, resultados positivos o negativos, tomar decisiones oportunas, entre otros.
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